Por:Francisco "Paco" Carmona Oliveros.
23 de Abril del 2019.
La falta de seguridad pública en general es una enfermedad social que si bien es cierto no es nueva, es una cepa que ha sido motivo de estudio de muchos personajes que se consideran "expertos y estudiosos de ese delicado problema".
El diagnóstico de tan potente y letal enfermedad ha sido dado por lo menos en los últimos 60 años al paciente que lo padece ( el pueblo Mexicano) de forma clara, con pequeñas variables.
El origen del mal ha sido convergente entre el total de los sesudos que se aplican para obtener datos que les permitan acabar con el objeto de su tarea, la INSEGURIDAD es tan peligrosa y volátil que inclusive puede acabar con los mismos "Científicos que lo estudian" si estos están en el sitio equivocado, en la hora, minuto y segundo fatal.
Este Diagnóstico construido a través del tiempo en que aparece la INSEGURIDAD, así plasmada en las tesis generadas al respecto y así entendido el origen por la mayoría del Pueblo que lo padece, esta basado en circunstancias muy dichas, vistas y vocifera das, de las cuales para efecto de esta reflexión, compartiré las siguientes:
*corrupción-Impunidad.
*falta de oportunidades de desarrollo
individual, familiar y colectivo.
*Estrategias políticas entre grupos
antagónicos.
*Incapacidad para detectar, combatir, generar Seguridad, por parte del poseedor de todos los elementos subjetivos y de personalidad subyacentes e intrínsecos en el obligado, responsable de la tutela de la Seguridad (el estado) por medio de todos los elementos, imperio y potestades que le confiere nuestro andamiaje constitucional y de acervo legal.
*Todas las demás que se puedan generar en el devenir de la contingencia o enfermedad llamada Inseguridad.
Hoy por hoy el pueblo Veracruzano esta unido por un sentimiento, por un anhelo, por una razón común y universal, lamentablemente es por una razón de Salud Social, la Inseguridad pública, el crecimiento de los índices delictivos de alto impacto, han rebasado la contención mediática del tema, hoy la percepción de la violencia y la sensación de inseguridad, ha mellado el ánimo y la tolerancia de nuestro noble pueblo Veracruzano y esto no es diatriba y menos lodo político.
Basta con que se realice un pequeño ejercicio de muestreo a lo largo y ancho del estado de Veracruz, para que se concluya que lo que aquí escribo, con tristeza y seriedad, es real.
Que hoy los ciudadanos libres y organizados, nos pronunciamos en una sola voz, por la obtención de resultados que impacten en nuestro ánimo y sensación de seguridad.
Por eso, desde aquí, le hago llegar a nombre de muchos Veracruzanos al Presidente de la República y al Gobernador del estado de Veracruz nuestros mejores deseos, confianza y Solidaridad, en la lucha por recuperar el sosiego perdido en Veracruz y la pa Nacional.
Sabemos que el tema requiere tolerancia y no desesperación, debido a que efectivamente la inseguridad, ha sido la materia no superada por las administraciones anteriores y las actuales están aplicadas en eso, a decir de ellas mismas.
Pero a su vez, nuestras actuales autoridades estatales y Federales, deben reconocer que el motivo que dio pie a que el pueblo Mexicano y Veracruzano viera en ustedes, la posibilidad de materializar los compromisos de acabar con los elementos del diagnóstico que provoca la Inseguridad, la miseria y el aniquilamiento de los pueblos y que los llevó al poder público, fue esa promesa de devolvernos lo que tanto señalaron tenían capacidad de darnos y que otros gobiernos, no habían podido lograr, entre lo más destacado, la Paz, la Seguridad y el Progreso, que juntos lo hacen todo, para un pueblo de bien, como lo es, el que nosotros conformamos.
Nuestro presidente ya lo dijo, el gobernador del estado de Veracruz ya lo asumió, en 6 meses el país y nuestro estado Veracruzano, empezará a sentir el sosiego, la tranquilidad, el progreso y la bondad de habitar en México y en nuestro Bendecido estado de Veracruz!!!... Al tiempo dijo mi Abuelo Don Belo Carmona Naranjo.
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