*Compañeros, les informo*
Luego de que por la pandemia *se restringió* el acceso a las *ruedas de prensa en La Parroquia*, acudimos a las convocatorias en el *Café del Portal*.
Sin embargo, hemos visto con malestar que ahí, la buena intención al hacer nuestro trabajo con los entrevistados se ha marchado por la mala actitud de algunos personajes.
*La marimba* toca a todo lo que da, afectando audios y grabaciones Justo en el momento en que los entrevistados comienzan a hablar y no se callan, hasta que se les da dinero.
*Algunos meseros* también piden a los entrevistados, causando una mala impresión que afecta nuestra imagen.
*El gerente del turno matutino* ha tomado una actitud misógina con las reporteras diciéndoles frases como _”¿Te podrías quitar para no molestar a los clientes”?_... _”Si dices que eres una dama compórtate como tal”_. _¿Eres una dama? ¡Pues no pareces!_. Entre otras expresiones que no vale la pena repetir
Los compañeros pagamos cada café que ahí consumimos, no nos regalan nada y por consiguiente no tendríamos porque soportar tan mal trato, que en algún momento nos va a llevar a un conflicto más grave, porque no es posible aguantar esa discriminación a las compañeras, escucharlas y quedarse callado.
*Por todo ello, tomamos acciones y el siguiente acuerdo.*
1.- Pedimos permiso en *El Estribo* del hotel Diligencias para que nos permita hacer entrevistas en el área ventilada.
2.- El Estribo *nos va a obsequiar un café Americano refil* durante la espera solo a reporteros.
3.- Si el reportero gusta puede llevar pan o galletas y ahí consumirlos está bien, pero si pide el desayuno a la carta hay que cubrir el costo.
4.- *El reportero no puede llevar invitados* a recibir esos beneficios exclusivos para la prensa.
5.- El entrevistado de antemano debe saber que pagará el desayuno que consuma.
*CONCLUSIÓN*
De esta forma estamos atendiendo el llamado que nos hicieron las compañeras reporteras y el malestar declarado por los compañeros, dando una opción sana, viable y con dignidad, para que evitar caer en provocaciones, malos tratos, misoginia de gente que no entiende la importancia de nuestro trabajo.
*Yo por mi parte*, de manera voluntaria y en solidaridad, *no regreso al Café del Portal* porque sería incongruente e indolente ante la agresión que mis pares reciben.
*Que conste*
Mi decisión es personal, la acción en solidaridad con los compañeros ya se hizo. Pero no puedo impedirle a los demás que sigan asistiendo aduciendo el pretexto de qué _”a mí no me han hecho nada”_.
El llamado es a la solidaridad, pero tampoco es una obligación, sin más por el momento, quedo de ustedes como su servidor.
Atentamente
*Rodolfo Herrera*
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