Por: Francisco "Paco" Carmona Oliveros.
A 11 de Junio del 2020.
La aprobación por el número de cabildos necesarios para la promulgación de la reforma electoral en el estado de Veracruz, ha sido lograda.
Mucho se especuló sobre la legitimidad de las sesiones de cabildo y sobre un posible fracaso del ejercicio para aprobar la cuestionada reforma, pero finalmente parece ser que este hecho No sucedió.
Por lo menos hasta ahora, que la noticia ocupa la palestra mediática estatal, nadie ha desmentido el hecho, por lo que "Habemus Reforma" aparentemente y este acontecimiento de ser real,
marca el inicio del acomodo de cada cosa en su lugar dentro del gobierno del estado, del los partidos políticos viejos y nuevos, asociaciones políticas, órganos electorales y sobre todo de los grupos políticos que habitan al cobijo del sistema de partidos políticos en sus dos niveles, local y Federal.
La realidad que impera en la legislatura local Veracruzana, deja de manifiesto de donde emana el poder y desde donde se ejerce para lograr las metas planteadas en pro del control político, económico y social absoluto de la nueva grey política empoderada y enrachada.
Es evidente el fortalecimiento del grupo que articula desde el poder ejecutivo, el cual continúa su avance pian, pianito, allegándose los triunfos necesarios para llegar a defender la corona en 2021 robustecidos.
Discretos operan con bisturí nuevo.
Los tiempos electorales han llegado, la pandemia no ha detenido los avances y aspiraciones de los actores que consideran tener méritos para alcanzar primero una candidatura y luego el triunfo en las urnas.
Por ello el escenario electoral Veracruzano requería adecuación bajo la tesis del partido en el poder, ya que su actuación a casi 18 meses de haber iniciado, No ha convencido a la mayoría de la población Veracruzana de ser una forma de gobierno "Conveniente" para los requerimientos y tiempos actuales, máxime que cabía la posibilidad de llevar a la revocación del mandato al titular del poder ejecutivo y con ello, el actuar del morenismo que orgullosamente agita la bandera de la 4T.
En lo personal considero que No todos los puntos de la Reforma Electoral son cuestionables, hay puntos muy positivos como el adelgazamiento del presupuesto que reciben los partidos politicos y la posible aplicación a rubros insatisfechos en nuestra realidad, por menciar alguno y que adrede ocupa el centro del discurso esparcido por todas partes por el presidente de la junta de coordinación política de la legislatura local, quien se adjudica el éxito de la reforma pero que sorrunamente, oculta el punto álgido de la reforma que es la Revocación del mandato aplicable al titular del ejecutivo, lo omite y es ahí donde se diluye cualquier buena intención.
No digo que sea ilegal la intentona de la estrategia, pero como cualquier acto jurídico que se considere desaseado o contrario a derecho es impugnable, creo que este tema dará para más y aún creo más que la reforma electoral recién aprobada por los cabildos Veracruzanos No es ni mínimamente un acto consumado.
¡Al tiempo, dijo mi abuelo!....
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