POR JESÚS VASQUEZ PINO
Veracruz, Ver.- La fuerza de los Mexicanos está a la vista de todas las naciones del mundo. Seguimos Solidarios en una hermandad única con el sello del patriotismo nacional. El dolor por la tragedia natural es compartido en un solo corazón del humanismo. Son más de 300 las personas que perdieron la vida pero seguirán en el recuerdo de sus familias.
No es la primera vez que nos unimos ante una devastación natural somos guerreros que salimos a la defensa por la vida. Fuimos emancipados a la fundación de un México que no se dobla ante las adversidades. La fortaleza son sus mujeres y hombres que amán a su patria.
Pero nos duele lo que es voluntad del Dios creador su mensaje en los dos sismos fue claro: No olviden el motivo de vivir en mis mandamientos.
La Sociedad mexicana avanza en la violencia entre humanos y políticos que le roban a su país.
Perdimos el rumbó como país al hacer puro materialismo donde los buenos valores de lo moral en la basura. Descuidamos el origen de la Creación Divina.
El medio ambiente destruido con una elevada contaminación y todo lo que se consume para vivir es ficticio. No importa el costo por avanzar destruimos todo a nuestro paso.
Éstos últimos días México volvió a su objetivo como acto de unidad de ser solidario con el prójimo en desgracia. No importó la clase social porque todos se han sumado a las labores de rescaté y búsqueda de personas desaparecidas.
Asimismo, Dios bendiga a quiénes se han desprendido de su alimento y despensa para entregar con todo su amor para esas miles de familias del territorio nacional en desgracia.
Lo más importante, la ayuda recibida de países que tienen el afecto a nuestro México. La mano solidaria sigue fluyendo de muchas manera no solo en dinero.
El corazón de los mexicanos cimbro desde las primeras horas del siete de septiembre con el primer temblor ocurrido en la noche que los convocó a brindar la ayuda necesaria entre los primeros afectados. El miedo fue vencido ante el llanto de niños y ancianos que perdieron sus hogares eso condujo a salir adelanté al rescaté por los mas vulnerables.
Las pruebas de fuego son superadas con el respaldo del Divino Creador y México sigue de pie con la bendición de Dios. Su gente es movida a seguir ayudando en la buena fe con asistencia de primer nivel.
Las autoridades tienen un gran adeudo con nuestros soldados y marinos que nuevamente mostraron su amor a la patria. Tendrán que ser declarados héroes de la nación.
Cuando sea superada la emergencia ellos recibirán la gloria y al mérito por su trabajo frente a los hermanos en desgracia.
Pero el reconocimiento amplio para todos los mexicanos que estuvieron en el lugar del sismo a cambio de nada, solo por salvar vidas y ayudar en los servicios de limpieza de los escombros.
¡Todos Somos México!
A la gloria de Dios como hermanos Es todo.
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