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sábado, 24 de diciembre de 2011

ARTICULISTA INVITADO:URIEL FLORES AGUAYO


Ya lo dijo Carlos Fuentes

Enrique Peña Nieto, ha tenido días difíciles, con errores básicos pero de gran proyección que le han costado en imagen y credibilidad. Sin duda, su saldo es negativo, por más que lo quieran minimizar, como quienes desde el oficialismo local, a falta de imaginación, lo atribuyen a una supuesta “guerra sucia “, pero la descalificación que le hizo Carlos fuentes, tal vez nuestro máximo escritor, es la más dura y contundente; al llamarlo ignorante está coronando la percepción que mucha gente empezaba a tener sobre el aspirante priista.

El saldo más negativo para Peña Nieto, es que haya dado los elementos para que se confirme que es una figura mediática y de papel, lo cual, para muchos, era difícil de aceptar, viendo, incluso, exageraciones o intenciones perversas e interesadas en quienes lo definían de tal manera. En su propia voz, muy pronto, el candidato del copete ilustró y ratificó ser una figura hueca y difícilmente apta para ser presidente.

Desde luego puede haber una baja relativa en las intenciones de voto para Peña Nieto, como ya se registra en algunas encuestas donde, además, le agregan el escándalo y la renuncia de Moreira, pero también hay otros efectos que vale la pena señalar: recibe un golpe muy fuerte a su imagen sobre todo en las clases medias y en los jóvenes, que son los más informados y donde se comparte acríticamente la figura moderna y de supuesta eficacia del Mexiquense. Los jóvenes de hoy, de redes sociales, no se estaban cuestionando el pasado del PRI ni los modos conque ha ascendido Peña Nieto, solo tenían a la vista su imagen fresa, juvenil y moderna, casi de galán de telenovela; con las muestras de ignorancia e ineptitud que mostró recientemente muchos de esas clase medias y jóvenes ya deben estar dudando seriamente de otorgarle su voto.

El escándalo de los libros ha querido ser disminuido por algunos periodistas y ciertos intelectuales que nos dicen, cantinfleando, que no es tan necesario leer para gobernar. Sin embargo, es en el ámbito de la cultura donde más golpeo la torpeza de Peña Nieto, por que dejó sin argumentos o se las puso más difícil a quienes ya estaban listos para apoyarlo; es el caso de Aguilar Camín y Jorge Castañeda, probablemente los autores del libro que presentó como suyo, siempre cercanos a proyectos de poder, del color que sea.

El caso es que los escenarios del 2012 se están moviendo, casi nada es lo que parece y casi nada será como se creía: un Peña Nieto, que tropieza por su ignorancia y que se puede desinflar, un López Obrador en ascenso y una tercia panista de la que difícilmente se hace uno o una. Si los amigos del PRI pensaban que los “pinos” los estaban esperando y que la campaña presidencial era un paseo, tendrán qué pensar seriamente si sostienen la candidatura de Peña Nieto y si postulan a cualquiera para las senadurías y las diputaciones. Salvo el boicot tácito de los “chuchos”, en el campo de la izquierda las cosas van muy bien teniendo como una siguiente prueba de fuego la candidatura a jefe de gobierno del Distrito Federal. Si sale bien librada de esa decisión, empecemos a creer que sí se puede.

Recadito: regale libros en esta navidad.

Urielfloresaguayo@hotmail.com

Xalapa Enríquez Veracruz a 15 de diciembre 2011

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